viernes, 8 de febrero de 2008

¿Qué extraño tiene que no los llamen terroristas?


De que nos extraña que el gobierno de Venezuela se niegue a denominar terroristas a los grupos guerrilleros FARC y ELN, si la mayoría de los miembros o asesores del actual gobierno o de los partidos políticos que lo apoyan fueron guerrilleros (mejor dicho, terroristas) en los años 60 y 70.

A la gente se le olvida que muchos políticos de la izquierda radical, que rechazaban el reformismo socialdemócrata de Acción Democrática, se sumaron a la idiotez de irse a las montañas y formar grupos guerrilleros (terroristas) para intentar derrocar a los gobiernos de la época y tomar el poder por las armas. Igual como lo han pretendido los grupos guerrilleros (terroristas) de Colombia, que han hundido a este hermano país en una guerra sin sentido.

A la gente se le olvida que la mayoría de los dirigentes políticos de izquierda, que hoy en su mayoría apoyan al gobierno, aunque también los hay de oposición, siguieron en los sesenta la consigna de la revolución cubana de crear en el mundo cien vietnam, para desencadenar procesos revolucionarios en contra del capitalismo, que lo único que causaron fue muerte en cada país donde se intentó esta locura.

A la gente se le olvida que el gobierno de Cuba, con Fidel Castro a la cabeza (es decir, desde hace más de 40 años), ha sido el único gobierno extrajero que ha invadido y ha entrenado y financiado a guerrilleros (terroristas) con el único fin de adueñarse del valor estratégico que tienen las reservas de petróleo venezolano. Y que esta aventura le costó a Venezuela una virtual guerra civil en los años sesenta, con innumerables atentados terroristas y la posible (gracias a Dios no) pérdida de la incipiente democracia obtenida en 1958.

La gente si recuerda la mentira comunista, mil veces repetida como propaganda, de la supuesta ferocidad de los gobiernos de Betancourt y Leoni y de las supuestas violaciones de derechos humanos. Tanto que Jorge Rodríguez hijo cree que cada vez que habla mal de AD y COPEI, puede resucitar a su padre, quien fue muerto durante esos gobiernos.

La gente si recuerda la mentida difuminada por los comunistas de que en el gobierno de Betancourt, la orden para la policía era "dispare primero y averigüe después" o que a Carlos Andrés Pérez se le conociese como "ministro policía".

Lo increíble es que uno escucha a persojanes de gobierno, como el alcalde de Maracaibo (Di Martino), y de oposición (para este ejemplo, voy a usar a Mary Montes, locutora de radio, que sabe más de béisbol que de política), diciendo que los guerrilleros son distintos a los terroristas, porque los guerrilleros tienen ideología. Y yo pregunto, ¿acaso Osama Bin Laden no tiene su ideología? extraña para muchos de nosotros, pero natural en su religión. ¿Qué virtuoso tiene una ideología que promete matar al enemigo para conseguir sus objetivos? o como decía el guerrillero (terrorista) "heróico" (léase, Ernesto Guevara, terrorista), una ideología que debía propulsar el odio al enemigo y debía convertir a un hombre normal en una máquina de matar.

Por todo esto, no es extraño que el gobierno venezolano se niegue a llamar terroristas a las FARC y al ELN. No los llaman terroristas, porque ellos mismos son o lo fueron alguna vez.

Pero nosotros si los llamamos como son. TERRORISTAS.

Por eso, NO MAS FARC. NO MAS ELN. NO MAS REVOLUCIONES.